El clima de la Patagonia presenta desafíos únicos para la construcción, pero también ofrece oportunidades para construir estructuras resistentes y sostenibles. Te contamos cómo el clima influye en la construcción en nuestra zona y cómo las empresas constructoras nos adaptamos para lograr proyectos duraderos y respetuosos del medio ambiente.

Vivir en geografías con clima frío implica que las paredes, techos, piso y vidrios de nuestras casas deben formar una barrera de protección y ser un abrigo.

La Patagonia es una región única en términos de clima y topografía, y estas características presentan un desafío especial para la construcción de estructuras resistentes y sostenibles en la región. Los fuertes vientos, las temperaturas extremas y la humedad son algunas de las características claves de la zona, que nos exigen crear sistemas constructivos con resistencia y adaptables al contexto.

Hablemos del frío: Como explican muy sencillamente en BioenergíaAndina, “un ambiente interno a 20°C y el exterior a 0°C, pierde calor a través de las paredes, ventanas, puertas y techos, proporcionalmente a esa diferencia. Cuanto mayor sea la pérdida de calor, mayor consumo de energía habrá. ¿Qué podemos hacer? Sumar aislamiento térmico para no depender tanto de la energía. Agregar aislación térmica es abrigar la casa y existen muchos materiales para hacerlo: lana de vidrio, cartón, telgopor, etc.”

Por otra parte, las condiciones climáticas locales también son una oportunidad, porque al enfrentarnos muy de cerca con las características de la naturaleza, nos exigen de toda nuestra creatividad para lograr proyectos armónicos, en total sintonía con el entorno, sostenibles y eficientes.

La utilización de materiales locales y técnicas de construcción adecuadas pueden ayudar a aumentar la resistencia de las estructuras frente al clima. Además, la integración de tecnologías de energía renovable, como paneles solares y sistemas de calefacción geotérmica, colaboran también en la reducción de la dependencia de los sistemas de energía tradicionales, mejorando la eficiencia y el rendimiento energético durante toda la vida útil de una obra.

Contemplar el paisaje local

Además de los desafíos climáticos, es importante tener en cuenta el paisaje para mantener la estética y la armonía visual que hacen de nuestra zona algo tan especial. Tenemos la suerte de vivir en una de las regiones más remotas y hermosas del mundo, y es fundamental defender la convivencia respetuosa con la naturaleza para preservar la belleza y la biodiversidad.

En ese sentido, desde Surwal observamos aspectos como la ubicación, el uso de materiales, colores, texturas y elementos presentes en cada obra, para lograr una reducción de su impacto, tanto durante la obra como una vez finalizada, durante la vida útil del proyecto.

Nuestra experiencia en CQ Gales

Actualmente en Argentina no existen leyes que obliguen el Etiquetado de Eficiencia Energética en edificios, pero ya hay varios casos en los que, de todas formas, se está trabajando en este proyecto. Nuestro edificio CQ Gales es uno de ellos y queremos compartir de qué manera logramos ser pioneros en este cambio.

Se estima que nuestro edificio, cuando se encuentre con el 100% de ocupación, consumirá 26356,62 kWh/mes de electricidad y 133977,6 kWh/mes de gas para calefacción y calentamiento de agua. Estos valores dependerán del mes y de la ocupación total. Sin embargo, estamos en pleno proceso de implementación de distintas alternativas para procurar reducir estos valores de consumo, permitiendo una reducción de costos en las facturas de electricidad y de gas, y aumentando a su vez el valor del inmueble:

• Aberturas de PVC, hormigón celular y sistema de aislación SATE: mejores propiedades de aislación acústica y térmica con respecto a las tradicionales opciones.
• Terrazas verdes: manto vegetal sobre grosor de tierra o sustrato que tiene como ventajas el aislamiento térmico y acústico de la vivienda, regulación de temperatura y humedad, protección y extensión de la vida útil del techo, capacidad de retención de agua y absorción del polvo.
• Ventilación natural con sistema COVE: logra un confort en el hogar de manera totalmente ecológica, si nos encontramos en zonas de viento es posible que podamos aprovechar esta circunstancia.
• Pinturas termoaislantes: crea una barreara que aísla y bloqueando la transferencia de calor entre materiales. Así logra reducir los consumos energéticos porque mantiene el calor en interiores y evita el efecto de “pared fría”.
• Revestimiento de paredes exteriores con el sistema SATE (FACHADAS VENTILADAS).

Respetar el entorno natural durante toda la obra es minimizar también la contaminación acústica y lumínica, evitar la alteración del terreno y la alteración vegetación natural en la medida de lo posible.

Clima, paisaje y ecología. La Patagonia es nuestro hogar y tiene mucho para darnos, en la medida en el que nos integremos a la zona proyectando un desarrollo acorde, respetuoso y sostenible.

Desde Surwal trabajamos para que este sueño de crecimiento se haga realidad a través de proyectos duraderos y acordes para nuestra región.